La vara de Moisés: El poder de Dios que consume todo lo falso
Cuando Moisés arrojó su vara ante el faraón, la transformó en una serpiente. Los magos de Egipto imitaron el milagro, pero la vara de Moisés, por el poder de Dios, devoró las de ellos. Este acto muestra que el poder de Dios es incomparable e irrefutable. El enemigo puede intentar imitar la obra de Dios, pero siempre será derrotado por la autoridad divina.
5/9/20252 min read


Versículo: Éxodo 7:10-12 (RVR1960) “Moisés y Aarón fueron a faraón, e hicieron como Jehová les mandó; y echó Aarón su vara delante de faraón y de sus siervos, y se convirtió en serpiente. Entonces, faraón llamó también a los sabios y a los hechiceros, y ellos, los magos de Egipto, hicieron lo mismo con sus encantamientos; porque cada uno echó su vara, la cual se convirtió en serpiente; pero la vara de Aarón tragó las varas de ellos.”
Reflexión: Este milagro fue un claro mensaje de que el poder de Dios es mucho más grande que cualquier poder humano o demoníaco. Aunque los magos de Egipto pudieron hacer una imitación momentánea, la serpiente de Aarón devoró las suyas, mostrando la victoria de Dios sobre todo lo falso. En nuestras vidas, podemos enfrentarnos a imitaciones del poder de Dios, pero debemos recordar que nada puede prevalecer sobre Su verdad y autoridad. Él es el único que tiene el poder para transformar, sanar y liberar de manera verdadera.
Pensamiento: ¿Estoy confiando plenamente en el poder de Dios, o estoy buscando respuestas en soluciones temporales que imitan lo divino pero no tienen el poder real?
Comparación: Es como ver dos fuegos: uno es verdadero y consume todo a su alrededor, el otro es solo una chispa que se apaga rápidamente. El poder de Dios es el fuego que nunca se apaga, mientras que las falsas soluciones del enemigo son solo chispas que se extinguen.
Acción: Examina tu vida y identifica áreas donde estés buscando soluciones en algo que no sea Dios. Puede ser una relación, un trabajo, o una estrategia humana. Ora pidiendo que Dios revele Su poder verdadero en esas áreas y confía en que Su autoridad prevalecerá sobre cualquier imitación.
Oración: Señor, gracias porque Tu poder es infinito y siempre prevalece. Perdóname por veces en que he buscado respuestas en lo falso, creyendo que había poder en cosas que no son de Ti. Ayúdame a confiar completamente en Tu autoridad y a caminar en la certeza de que Tú eres el único que puede transformar mi vida y mi situación. En el nombre de Jesús, amén.